El Servicio de Fronteras de Ucrania denegó la entrada en territorio nacional a más de un millar de ciudadanos rusos en los últimos cinco días, informó hoy el Servicio de Seguridad del país eslavo.
“Desde el 17 de abril, fecha en que se reforzó el control fronterizo a ciudadanos de la Federación Rusa que viajan a Ucrania, se ha denegado la entrada de más de 1.000 personas”, dice el comunicado de la entidad.
El documento indica que unas 5.000 personas pudieron cruzar la frontera entre ambos países conforme al trámite simplificado previsto para los residentes de zonas fronterizas.
Según se desprende de la nota, en los últimos días no se ha registrado un aumento de tránsito a través de la frontera ruso-ucraniana. Al mismo tiempo, ha aumentado un 50% el flujo de pasajeros a través de la frontera con Crimea.
El pasado 17 de abril, Ucrania anunció que prohíbe la entrada de los varones rusos de entre 16 y 60 años y que esta restricción se aplicará en todos los medios de transporte, incluido el aéreo.
El Servicio de Fronteras del país aclaró posteriormente que la medida prevé varias excepciones y que la decisión definitiva se tomará en la frontera en función de cada caso concreto.
El ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, calificó de “discriminatoria y no amistosa” la decisión de Kiev.
