Los tres meses indicados por el nuevo presidente ucraniano Piotr Poroshenko sólo serán suficientes para poner fin a la operación especial en el este de Ucrania, pero no para imponer la paz en el país, declaró hoy el senador ruso Víctor Ózerov.
Según información anterior, Poroshenko planea presentar durante la ceremonia de su investidura del 7 de junio un plan de arreglo negociado de la situación en Ucrania y proponer una amplia amnistía.
El presidente ruso Vladímir Putin y Poroshenko se pronunciaron este viernes a favor de lograr el cese inmediato del derramamiento de sangre en el este de Ucrania y de las operaciones de combate por las dos partes del conflicto.
“Para juzgar si bastan o no tres meses, es necesario que Poroshenko anuncie el objetivo final. Solo entonces se podrá decir qué medidas hace falta adoptar y en qué tiempo se requerirá para conseguirlo”, dijo a esta agencia Ózerov, quien encabeza la comisión para la defensa y seguridad en el Consejo de la Federación (Senado ruso).
Según el periódico Kommersant, los parámetros principales de las transformaciones a realizar en Ucrania fueron propuestos por el G7, Kiev solo podrá introducir enmiendas.
El primer bloque del plan incluye el diálogo a escala del país y el logro de la concordia, en lo que insiste Poroshenko.
El segundo estipula sostener diálogo internacional con el fin de alcanzar un acuerdo político entre EEUU y Rusia y uno económico entre Bruselas y Moscú. El tercero supone sostener negociaciones entre Ucrania y Rusia.
El senador precisó que Moscú estará dispuesto a dialogar con Kiev solo en el caso de que el nuevo presidente ucraniano demuestre sus intenciones pacíficas.
