La Duma de Estado, cámara baja del Parlamento ruso, aprobó hoy en tercera y última lectura una ley que aumenta la responsabilidad por financiar acciones extremistas.
Así, se establece responsabilidad penal por financiar la preparación y la ejecución de todo delito de índole extremista. Además, se castigarán llamamientos públicos al extremismo, así como la instigación al odio a través de internet. También quedarán sancionados los intentos de atentar contra la dignidad de otra persona.
Aumenta el castigo por organizar acciones extremistas, incluidos las religiosas, que se sancionarán con multas o prisión de hasta ocho años.
Además, se prevé la confiscación de los bienes adquiridos a raíz de un crimen de carácter extremista.
El año pasado, el titular del Interior de Rusia, Vladímir Kolokóltsev, pidió a los senadores aprobar un proyecto de ley para penalizar la financiación de la actividad extremista.
