El presidente ruso Vladímir Putin acusó hoy a EEUU de torpedear el proyecto South Stream, gasoducto submarino que permitiría a Rusia diversificar las rutas de exportación de hidrocarburos.
“Es normal porque (EEUU) es un rival y lo hace todo por abortar ese contrato”, declaró Putin de visita en Austria.
Al mismo tiempo, señaló que “en esa rivalidad también se usan los medios políticos”.
Recordó que Washington se opuso en 1962 al suministro del gas ruso a Austria y que en la actualidad se propone entrar en el mercado europeo para vender el gas de esquisto. El combustible que Rusia suministra a Europa por tuberías, según Putin, será en cualquier caso menos caro que el gas de esquisto que llegaría en forma licuada de EEUU.
Putin resaltó que Rusia no pretende marginar a Ucrania como país de tránsito sino “simplemente desarrollar las infraestructuras de transporte”.
La construcción de la tubería submarina South Stream empezó en la costa rusa del mar Negro en diciembre de 2012. El gasoducto tendrá cuatro líneas con una capacidad total de 63.000 millones de metros cúbicos al año, que se alcanzará en 2018.
La actual configuración del proyecto prevé que el tramo submarino se conectará al terrestre en Bulgaria de donde irá a Serbia, Hungría, Eslovenia y el norte de Italia. El proyecto permitirá al grupo gasista ruso Gazprom diversificar las rutas de exportaciones a Europa, en particular, reducir la dependencia del tránsito a través de Ucrania.
