Unos palillos inteligentes son la última sensación en seguridad alimentaria en China.
El gigante de Internet Baidu ha presentado unos palillos electrónicos capaces de detectar si lo que te llevas a la boca cumple las condiciones mínimas.
Un video de la compañía muestra el funcionamiento: los sensores de última tecnología en sus extremos analizan el contenido y envían en pocos segundos el resultado a un teléfono móvil a través de wifi o bluetooth. El aparato mide la temperatura, la cantidad de sal, el contenido de nutrientes y, lo que es más importante, la calidad del aceite. En caso de que este supere el 25 % de TPM (total de componentes polares o indicador de su calidad), una luz roja aparece en la pantalla del teléfono.
Las crisis alimentarias son cotidianas en China y una de las mayores preocupaciones de la población. Muchos se preguntan qué se puede consumir sin miedo después de que los escándalos hayan salpicado a todos los alimentos: garras de pollo sumergidas en peróxido de hidrógeno para conseguir un aspecto más blanco, cerdo con capacidad fluorescente en la oscuridad, leche para niños contaminada con melamina, sandías que explotan.
Pero la preocupación ubicua es el digouyou o aceite de alcantarilla: es el aceite multireciclado que sale de los mataderos o los restaurantes, recogido en cubas y supuestamente reciclado –en realidad, apenas filtrado- que es revendido a los pequeños establecimientos. El digouyu también es recogido directamente de las alcantarillas por tipos con grandes cucharones que aprovechan que el aceite flota por encima del resto. Las autoridades decretaron una campaña el pasado año que se saldó con un centenar de detenidos y una veintena de encarcelados.
“En el futuro, podrás saber a través de nuestros palillos el origen del aceite, el agua y otros alimentos, si son malos y cuántos nutrientes contienen”, ha dicho en la presentación Robin Li, director general de Baidu.
“Los palillos encarnan la sabiduría china, y ahora los hemos combinado con nuestra más avanzad tecnología”, ha añadido un alto ejecutivo. El artilugio ha generado una expectación enorme en las redes sociales chinas, pero la compañía ha aclarado que por ahora sólo cuenta con algunos prototipos y que desconoce cuándo empezará la venta o su precio.
