La Universidad Complutense de Madrid acogió hoy unas jornadas para analizar la situación en Ucrania.
Representantes de partidos políticos españoles, organizaciones sociales y testigos del conflicto fueron los encargados de explicar los diversos puntos de vista sobre la situación que se vive actualmente en Ucrania.
Uno de ellos, el representante de Izquierda Unida, Willy Meyer, acusó directamente a Estados Unidos y a la Unión Europea. "EEUU y la UE impulsaron el golpe de Estado en Ucrania sabiendo que derivaría en un conflicto armado en el que morirían cientos de personas".
El objetivo del acto, que estaba organizado por Andrés Barrera y Ángeles Díez, profesores de la Universidad Complutense de Madrid, era crear "una sociedad cada vez más justa y enfrentar la guerra mediática con información veraz, especialmente con el conflicto ucraniano", explicó Díez.
Las ponencias enmarcaron su discurso en la lucha contra el fascismo. "El fascismo hoy en día adopta otro rostro, otras caras. Hay que estar muy atentos", afirmaba Díez.
"El conflicto que hoy se vive en Ucrania no es una disputa territorial entre Rusia y Ucrania, como nos quieren hacer ver, es una disputa entre fascistas y antifascistas", explicaba Juan de Dios Villanueva, secretario de Relaciones Internacionales del Partido Comunista de España (PCE).
"El conflicto tiene que ver con el expansionismo de la OTAN hacia el este. Tiene que ver con el carácter fascista del Gobierno de Kiev. Parece una ironía de la historia: los que fueron vencidos en la Segunda Guerra Mundial, los fascistas, son ahora apoyados por los gobiernos de los países que fueron vencedores de la guerra", prosiguió el secretario.
El secretario de Relaciones Internacionales del PCE aseguró que los líderes occidentales consideran el control de Ucrania como "un factor fundamental para evitar que Rusia se convierta otra vez en una gran potencia".
El representante del Partido Comunista aprovechó la ocasión para recordar el agradecimiento histórico por el apoyo a la izquierda española de los pueblos de la antigua Unión Soviética.
Willy Meyer, de la Comisión Ejecutiva Federal de Izquierda Unida, y exeurodiputado del partido, explicó en varias ocasiones que "el golpe de Estado de Ucrania estaba organizado, impulsado y financiado por la Unión Europea y EEUU, a sabiendas de que derivaría en un proceso de conflicto armado".
"Europa debería ser la más interesada en acabar con las guerras, como europeo siento vergüenza", sentenció.
Además, destacó el papel relevante que ha jugado la socialdemocracia en el conflicto ucraniano. "La deriva socialdemócrata es cómplice con la impunidad", señaló.
En cuanto a la próxima alta representante europea de exteriores, Federica Mogherini, afirmó que tiene "muy poca confianza de que haya un giro en la política exterior bajo su mandato".
Meyer explicó que el caso ucraniano, que considera un crimen, es "uno de los muchos ejemplos de la impunidad en las relaciones internacionales". "Se debe exigir el estricto cumplimiento del derecho internacional", aclaró.
El representante de Izquierda Unida destacó el desplante que Europa y Estados Unidos están haciendo a Rusia. "Me parece muy grave lo ocurrido en la última cumbre de la OTAN. En primer lugar no invitaron a Rusia y en segundo lugar convirtieron a la Federación Rusa en un adversario. Esto es un retroceso y si no lo paramos volveremos a la guerra fría", advirtió Meyer.
Agustín Ríos, del Partido Iniciativa Comunista y uno de los fundadores del Comité de apoyo a la Ucrania antifascista de Madrid, recordó la masacre de Odessa, "que sigue estando impune".
"Formamos el Comité de apoyo cuando empezamos a ver cuál era la naturaleza del conflicto y tras ver masacres como la de Odessa. Queríamos combatir la información falsa de este conflicto y canalizar todo el apoyo económico, logístico e incluso moral a las fuerzas antifascistas levantadas en Donbás", explicó Ríos.
Ramiro Gómez, uno de los brigadistas españoles que se fue a Donbás, y representante de la Iniciativa Humanitaria "Europe with Donbass" fue otro de los encargados de dar su testimonio.
Gómez aseguró que la situación en Ucrania es una "masacre" y que han vendido "una tregua falsa".
Por otra parte, mostró su apoyo a la autodeterminación de Novorrosia.
El acto se ha desarrollado con tranquilidad a excepción de la intervención de un ciudadano ucraniano que pedía "diversidad de opiniones". Sin embargo, no hubo altercados como en anteriores ocasiones, cuando un grupo de fascistas ucranianos entró al auditorio para detener la conferencia y tuvieron que ser expulsados de la universidad.
El cierre del acto corrió a cargo de los profesores y de Susana Oviedo, que presentó la Plataforma Global contra las Guerras. "Todos los conflictos abiertos forman parte de una misma guerra. Estamos en una tercera guerra mundial, pero se expresa de forma distinta y hay que evitar que continúe", terminó Ángeles Díez.
