El nuevo Gobierno de Afganistán debe erradicar la corrupción y controlar su territorio de manera más efectiva, de lo contrario la inacción del Estado terminará fortaleciendo a los insurgentes, declaró a Nóvosti el exembajador estadounidense en Afganistán, Peter Tomsen.
"EEUU va a ayudar, pero el gobierno de Ghani y su primer ministro Abdullah deben desempeñarse mejor que Karzái en conservar la estabilidad política y no contribuir al caos mediante la corrupción, la ineptitud y la incapacidad de proveer servicios básicos", opina Tomsen.
Ashraf Ghani Ahmadzai asumió el cargo de presidente de Afganistán el 29 de septiembre y nombró como primer ministro a su competidor en las elecciones presidenciales, Abdullah Abdullah.
Las unidades del Cuerpo de Marines de EEUU y sus aliados británicos finalizaron oficialmente sus operaciones en Afganistán.
El domingo, el Ministerio de Defensa del Reino Unido informó que la base británica Camp Bastion, ubicada en la provincia afgana de Helmand, pasó al control de las fuerzas de seguridad nacionales.
Tomsen subrayó que el fin oficial de las operaciones no significa que las tropas estadounidenses dejarán el país. En lugar de combatir, las fuerzas estadounidenses realizarán tareas de asesoría.
Representantes de alto nivel de la OTAN informaron previamente que del contingente actual –con un máximo de 139.000 soldados– a principios de 2015 se pasará a los 12.000 soldados extranjeros: 10.000 estadounidenses y 2.000 de otros países de la Alianza.