"Hemos logrado aplazar (la ejecución) por un tiempo, pero no sabemos hasta cuándo", señaló el vicecónsul, Damir Galiulin.
Horas antes, el representante de la embajada rusa en Islamabad, Vadim Zaitsev, comunicó que la ejecución en la horca podría llevarse a cabo en la mañana de este domingo.
La embajada de Rusia en Pakistán, según el diplomático, envió a las autoridades del país una nota con la solicitud de aplazar la ejecución de Ajlak.
"Aplicamos los esfuerzos por evitar esta ejecución y hemos remitido la nota correspondiente", dijo Zaitsev.
Según el conocido activista ruso Lev Ponomariov, de la ONU Por los Derechos Humanos, la situación es "dramática" y hay que hacer todo lo posible para suspender el cumplimiento de la condena.
"Hay que hacer lo posible para suspender la ejecución porque es una barbaridad", dijo Ponomariov a RIA Nóvosti.
Agregó que Rusia podría colaborar con EEUU para solucionar este asunto, porque Washington podría, según su opinión, influir sobre la decisión de las autoridades paquistaníes.
Ajlak nació en Volgogrado en 1979. En 2003 un tribunal paquistaní lo condenó a la pena capital por la implicación en un atentado contra Musharraf. El ciudadano de Rusia no se declaró culpable.
Según el encargado de los DDHH del Ministerio de Exteriores ruso, Konstantín Dolgov, la diplomacia rusa hace lo que puede para evitar la ejecución del ciudadano ruso y atenuar su condena.
"Se toman todos los pasos necesarios (para suspender la ejecución)", aseguró Dolgov.
Mientras, en la Embajada rusa en Islamabad dijeron que la ejecución fue aplazada hasta la llegada de la madre del condenado desde Rusia que podría producirse mañana.
El primer ministro de Pakistán, Nawaz Sharif, revocó la moratoria sobre la aplicación de la pena de muerte en el país después de que los talibanes perpetraran un ataque contra un centro educativo en Peshawar, en el noroeste de Pakistán, con el resultado de al menos 148 muertos, la mayoría de ellos estudiantes.