Los españoles están por debajo de la media de la UE en satisfacción general, según el organismo europeo: mientras que la media europea es de un 7,1, la española es de 6,9 en una escala de 0 a 10.
Los datos corresponden a 2013, cuando Eurostat comenzó a medir el bienestar que perciben los ciudadanos de todo el continente.
"Estar en riesgo de pobreza o en situación de falta de recursos es especialmente relevante", destaca Eurostat, motivo por el que los países más afectados por la crisis son también los que presentan una menor puntuación en su nivel de satisfacción.
Sin embargo, añade el organismo, "es la mala salud la que impacta de manera más negativa en la satisfacción con la vida".
España, a pesar de que se sitúa por debajo de la media europea, no es de los países más insatisfechos: Hungría, Chipre, Grecia o Portugal son de los más infelices.
Los más satisfechos con su vida son los países del norte, finlandeses, suecos o daneses, según Eurostat.