La donación del aparato que recorrió este jueves unos 60 km desde el aeropuerto de Toluca y cruzó la ciudad de México para ser recibido en la sede del la Escuela Superior de Ingeniería y Mecánica Eléctrica del IPN.
El fuselaje del Airbus A320 servirá para que los alumnos de tecnología aeronaval realicen proyectos de diseño y construcción de los trenes de aterrizaje de reemplazo y planes de acción de emergencia.
Los alumnos politécnicos podrán ensayar sobre el aparato retirado del servicio este año el diseño de la solución para el desarmado y armado del fuselaje en dos secciones, elaboración de plataformas para montaje del avión en las instalaciones de la escuela y diseño del sistema de iluminación exterior.
Otro proyecto académico contempla prácticas académicas y técnicas de construcciones aeronáuticas, corrosión de metales en aeronáutica, reparaciones estructurales, seguridad en la aviación civil y manufactura aeronáutica.
La aerolínea mexicana Interjet, cuya flota la integran tanto aviones europeos Airbus A320 como naves rusas Sukhoi Superjet-100 (SSJ-100), reveló el viernes que desde 2005 las normas de la empresa prohíben que en la cabina de sus aeronaves permanezca un piloto en solitario.
La compañía aérea mexicana ha sido pionera en indicar que un piloto puede salir de la cabina cuando la aeronave alcance los 10 mil pies de altura, para que alguno de sus pilotos pueda salir de la cabina de mando.
Interjet, controla la cuarta parte del mercado nacional en México, cuenta con una flota de 13 aviones rusos para 93 pasajeros del Superjet-100, que sumarán 30 en 2016; y 39 aviones Airbus A320 de fabricación europea –como el siniestrado–, para un total de 69 naves.