"En cuanto la Fiscalía nos dé la orden, estamos listos", informó el jefe de la Policía local, Ulung Sampurna Jaya, citado por el periódico The Jakarta Post.
El mando policial aseguró que los condenados a la pena capital serían abatidos al mismo tiempo por diferentes grupos de fusileros.
Se informó además que el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, el primer ministro de Australia, Tony Abbott y los presidentes de Brasil, Dilma Rousseff y de Filipinas, Benigno Aquino, han pedido clemencia por los acusados, mientras el Gobierno de Indonesia, encabezado por Joko Widodo, defiende el uso de la pena de muerte como medida radical contra el tráfico de drogas.
Los australianos Andrew Chan y Myuran Sukumaran, el ghanés Martin Anderson, la filipina Mary Jane Veloso y los nigerianos Myuran Sukumaran, Raheem Agbaje Salami, Okwudili Oyatanze y Silvester Obiekwe Nwaolise aguardan en sus celdas su ejecución.
Anteriormente se supo que de cumplirse la sentencia contra Gularte, quien tiene diagnosticada una esquizofrenia paranoide, se tratará del segundo ciudadano de Brasil ejecutado en Indonesia tras el fusilamiento de Marco Archer Cardoso Moreira el pasado mes de enero, condenado a muerte por el mismo delito.