"Nos queda la pregunta, ¿por qué en Occidente no se dan prisa por descubrir como el nacionalismo y la actitud bélica destruyen el destino de millones de ucranianos? Tal vez porque los políticos occidentales deberían admitir en ese caso sus propios errores, así como que tienen parte de responsabilidad por la situación reinante", cita el diario las palabras del jefe del Parlamento.
Komsomólskaya Pravda revela la esperanza de Narishkin en que las promesas de Occidente de influir en el cumplimiento de los acuerdos de Minsk no resulten vanas, y que "los colegas europeos y estadounidenses entiendan mucho más de lo que son capaces de reconocer públicamente".
El parlamentario subrayó que en el país eslavo resulta cada vez más relevante el principio de la llamada conveniencia revolucionaria, cuando el objetivo justifica los medios que se emplean para lograrlo, de allí las leyes absurdas que se aprueban.
"Entre ellas se encuentra la justificación y glorificación de los colaboradores de la dictadura nazi", considera Narshkin, quien previene de las consecuencias graves de la tergiversación de la historia y la creación de leyes absurdas para las futuras generaciones de Ucrania.