Con un diseño futurista, obra del estudio de diseño Chelles & Hayashi de Sao Paulo, la antorcha presenta una innovación basada en el movimiento de los segmentos que la componen, estos se abrirán y expandirán cuando la llama pase de un corredor a otro durante su recorrido olímpico, que la llevará a 300 ciudades de 26 estados brasileños a manos de 12.000 corredores.
"Queremos mostrar al mundo la química que, creemos, va a nacer del encuentro de la llama olímpica con el calor humano brasileño", dijo Nuzman.
Explicó que "sería imposible montar semejante logística sin la colaboración de los Gobiernos y sus respectivos servicios públicos como seguridad, control del tráfico y orden público, entre otros".
"Algunas ciudades también organizarán celebraciones para marcar el fin del relevo de la antorcha olímpica cada día", agregó.
En concreto, el transcurso de la llama olímpica durará entre 90 y 100 días tras su tradicional encendido en una ceremonia en la ciudad griega de Olimpia, lugar de nacimiento de los Juegos Olímpicos de la Antigüedad.
Posteriormente, viajará a través de aproximadamente 20.000 kilómetros de caminos brasileños y volará otros 16.000 por el norte y centro-oeste del país, entre las ciudades de Teresina y Campo Grande.
El relevo de la antorcha olímpica finalizará el 5 de agosto del 2016, cuando el último portador encienda el pebetero olímpico durante la ceremonia de apertura en el Estado Maracaná, dando inicio a los juegos que serán el colofón de Brasil como anfitriona de grandes eventos deportivos tras el gran éxito del Mundial de Fútbol de 2014.