Según el diputado Vadim Denguin al que cita el diario, la norma tiene como objetivo reforzar la seguridad de las redes internas en Rusia.
"Hay que tener en cuenta que las mayoría de las redes sociales y los programas y aplicaciones para estas no se crearon en Rusia, sino en el extranjero, por lo que podrían utilizarse contra el país incluso a nivel de programación", explicó Denguin, vicepresidente de la Comisión para la Política de la Información de la Duma.
En opinión del parlamentario, a los funcionarios rusos "no les conviene" emplear móviles y ordenadores de trabajo para conectarse a las redes sociales.
"No deberían perder el tiempo, puesto que cada uno tiene sus deberes y obligaciones profesionales; además, el bloqueo de estos servicios está justificado por motivos de seguridad de las redes internas", argumentó.
Al mismo tiempo, el legislador admitió que la iniciativa no debe afectar a aquellos funcionarios públicos que utilizan las redes sociales como medio de contacto con la ciudadanía.