Mas ha acudido acompañado de su esposa, Helena Rakosnik, a las 12.00 (hora local) al centro electoral, donde le esperaban los fotógrafos de la prensa y ha sido saludado por partidarios y simpatizantes, algunos de los cuales han querido fotografiarse con él y desearle personalmente suerte.
“No nos lo han puesto fácil”, ha respondido Mas.
El presidente catalán ha tenido que esperar más de 30 minutos debido a la elevada afluencia de votantes.
Cuando ha ido a depositar su voto se han producido un incidente, cuando un votante ha tratado de desplegar una bandera española.
Otras personas han contestado "¡fuera!" y han arropado a Mas al grito de "¡presidente!" e “¡independencia!”.
Según medios locales, quienes han tratado de interrumpir esta mañana el voto de Mas son militantes del Partido Popular y VOX, un pequeño partido de derechas.
A la salida, el presidente catalán se ha dirigido a los medios de comunicación en catalán, en español, en inglés y en francés.
“Hoy es una gran victoria para la democracia en Cataluña”, ha dicho Mas.
El presidente catalán se ha referido a los obstáculos a los que se ha enfrentado el proceso soberanista legal y recalcó su carácter plebiscitario.
“Todo el mundo sabe que más allá de la formalidad legal, estas elecciones van más allá, son unas elecciones excepcionales y estamos ante un plebiscito sobre el futuro de Cataluña”.
Estas elecciones, insistió, “se leerán como un plebiscito sobre el futuro de Cataluña”.
Insistió en que el Gobierno catalán no ha tenido otra opción ante la negativa del Gobierno central a convocar un referéndum de independencia.
Mas también comentó la elevada participación: “Nunca antes había hecho tanta cola para votar, es una buena señal, como es una buena señal la atención de los medios de comunicación de Cataluña, de España y del mundo”.
“Pase lo que pase hoy, habrá formalmente ganadores y perdedores, pero de hecho ya hemos ganado todos votando como lo hemos hecho, a pesar de estos obstáculos”, ha dicho al agregar que, pese a todo, “el país lo tendremos que construir finalmente entre todos”.
Preguntado por los medios extranjeros sobre las negociaciones con Madrid y Bruselas, Mas respondió que “la actitud de las instituciones de Cataluña es una actitud muy positiva” y recordó la “voluntad a negociar” de la Generalitat.
“Si ganamos, si obtenemos una victoria hoy (…) nos sentaremos a la mesa a negociar con las instituciones españoles, la Comisión Europea y los Estados europeos para negociar esta cuestión de la manera más positiva”, explicó.
Agregó que en esta cuestión “todo el mundo debe salir ganando”.
“No es una cuestión de Cataluña, es una cuestión también de España y de toda la Unión Europea”, concluyó.
Aunque firmada de acuerdo con la legislación española, los partidos independentistas han planteado estos comicios como un plebiscito sobre la secesión de España, ante la imposibilidad de negociar un referendo con el Gobierno central.
Mas aseguró que, de obtener una mayoría parlamentaria (aunque no necesariamente de votos) favorable a la independencia, la primera medida será aprobar una "declaración solemne" en el Parlamento catalán para iniciar el proceso de "desconexión" de España.
