El acta de acusación manifiesta que los acusados consiguieron armas de forma ilegal, contactaron con representantes del EI en Siria y empezaron a planear un ataque en el Valle de Emek y contra la policía.
Entre los acusados se encuentra Ahmad Ahmad, de 26 años y nacido en la localidad de Nazaret. Ahmad ya está en la cárcel cumpliendo una condena a cadena perpetua por su implicación en el asesinato del taxista Yafim Weinstein en el 2009.
Otros tres acusados son Mahmud Ihav Sarif, de 22 años y también de Nazaret, Ahmad Omer Hagana, de 20 años, y Mohamed Hamad Gazal, de 23 años, ambos de la localidad de Yafia.
Los tres imputados restantes son Ibrahim y Ali Jubara, de 35 y 32 años, respectivamente, y de la localidad de Purdis. Los dos están acusados de vender 20 balas a los otros acusados en abril del 2015. El séptimo imputado es Baha Aldin Naaran, de 22 años y de Yafia.
"Hay cuatro acusados relacionados con la red terrorista Daesh (acrónimo en árabe para el EI) y acusados de tener intención de establecer un escuadrón en Israel para cometer ataques", señaló el portavoz de la policía israelí, Micky Rosenfeld, en un comunicado.
A los acusados se les imputa también un ataque que destruyó un quiosco en Yafia en el 2012. Los jóvenes lanzaron cócteles Molotov porque el pequeño establecimiento vendía bebidas alcohólicas.
