"El contrato ya fue suscrito" y entró en vigor, dijo Chemezov a periodistas.
Agregó que cuando se ejecute la primera parte del contrato, Teherán retirará la demanda judicial por su incumplimiento.
En 2007, Moscú y Teherán firmaron un contrato de unos 800 millones de dólares para el suministro de los sistemas S-300.
Tres años más tarde, el entonces presidente ruso, Dmitri Medvédev, anuló la transacción para no infringir las sanciones internacionales contra Irán, a lo que Teherán respondió con una demanda judicial por 4.000 millones de dólares.
En abril pasado, el presidente ruso, Vladímir Putin, firmó un decreto que derogaba la prohibición de entrega de los sistemas S-300 a la nación persa.