El máximo órgano deportivo atiende así el recurso presentado por la Federación Internacional de Atletismo (IAAF), después de que el caso pasase por la Federación Española, donde fue absuelta.
La sanción llega dos años y medio después de que se le abriera un expediente sancionador por presunto dopaje.
Domínguez, senadora por el Partido Popular en esta última legislatura, se defendió diciendo que desde 2012 sufría de hipotiroidismo subclínico, una enfermedad que explicaría las anomalías en sus datos hematológicos.
La atleta se había retirado hace tiempo de la alta competición.
Domínguez estuvo implicada en la operación Galgo, la trama de presunto dopaje que Eufemiano Fuentes había montado en el atletismo español.
El caso finalmente fue cerrado por defecto de forma, aunque quedó en la retina la bolsa de sangre con las iniciales de Urco.
Domínguez tenía un perro que se llamaba Urco. Fuentes marcaba las bolsas de sangre de sus pacientes con el nombre de sus mascotas.