La semana pasada el alcalde de Cannes David Lisnard firmó una orden que prohíbe la ropa de playa que no respete "la buena moral y el secularismo".
Se precisa que seis mujeres en burkini fueron obligadas a abandonar la playa, mientras que otras cuatro tuvieron que pagar una multa de 38 euros.
En abril de 2011 Francia introdujo una prohibición sobre el uso de ropa musulmana, que cubre completamente la cara, por lo que la ley francesa prohíbe el uso de tales atuendos en lugares públicos.
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos en el verano de 2014 dictaminó que la normativa es válida.