"Después de las explosiones el Gobierno de nuestro país intenta normalizar la situación, intentamos tomar todas las medidas necesarias, fue creado un comité adicional para garantizar la seguridad de los turistas en Tailandia", indicó Athikarn Dilogwathana, una representante de la embajada.
Además, Tailandia coopera con las respectivas instituciones de otros países, que antes expresaron su intención de ayudarle.
El 23 de agosto tres explosiones ocurrieron en la provincia de Pattani de Tailandia, dejando un muerto y 29 heridos.
Además, los pasados 11 y 12 de agosto, coincidiendo con los festejos del cumpleaños de la Reina, una serie de explosiones e incendios se produjo en los lugares de interés turístico del oeste y sur del país.
Cuatro personas murieron y otras 35 resultaron heridas, incluidos turistas extranjeros.
Hasta la fecha, ninguna organización ha reivindicado los ataques.