Unas palabras que coinciden con las pronunciadas por el president de Catalunya, Carles Puigdemont, durante su discurso conmemorativo en el que anunció que haría una propuesta al Gobierno central de España para celebrar un referéndum.
“Voy a insistir el día 28 en hacer una propuesta de referéndum a la política española”, aseguró.
Al respecto, la portavoz del Gobierno en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría, considera a la propuesta “rupturista y oportunista” porque “sólo genera división y ruptura entre los catalanes” y en ningún momento “podrá ser acordada”. Asimismo, insistió en que se trata de una propuesta “ilegal” y la Ley “es la expresión de la democracia: los gobernantes han de regirse por el respeto a la Ley”.
En este sentido, Ana Surra afirma que el Gobierno de España está a años luz de lo que está ocurriendo, no sólo en Catalunya, sino también en el resto del país. Surra opina que “todo esto es producto de las discusiones” en las que está enfrascado el Gobierno en funciones debido a que no han logrado la investidura. Unas discusiones que transcurren en el tono de “dame tu voto, pero tienes que votar lo que yo quiero”, de parte del Gobierno español, señala la diputada.
En Madrid “no sólo están desconectados de su propia gente, de la que no tienen ni idea de lo que la gente padece para llegar a fin de mes, sino que están viviendo en un limbo político, instalados en siglos pasados, y menos saben aún de lo que está pasando en Catalunya”.
Y prosigue Ana Surra: “ellos (la administración central) hablan como si hablaran en el pasado: ‘la ley dice esto y ustedes no pueden hacer nada’. La gente quiere desconexión, vivir y decidir su propio destino. El problema es que mientras en España no haya Gobierno, Catalunya no puede discutir la desconexión”. Y advierte: “apenas el propio Gobierno empiece a presionar con cárcel a las decisiones del Parlament, ahí tendrá que intervenir la Comunidad Internacional.
El Gobierno, apunta Ana Surra, “hará todo lo que esté a su alcance para evitar la escisión de Catalunya, pero no lo podrá evitar. No podrá imponer la fuerza porque estamos en el siglo XXI y no lo aceptaría nadie. Por otro lado, “si piensan que todo va a acabar con el encarcelamiento a los dirigentes, están equivocados, eso provocará el efecto contrario porque no podrán meter a todos en la cárcel”.
Ana Surra explica que en menos de un mes en Catalunya se votarán las tres “leyes de desconexión”, a causa de cuya propuesta, la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, está imputada y “tendrá que ir a prisión”, porque, según Ana Surra, es así como resuelve las cosas el Gobierno Central, una acción que “provocará un gran cambio” en la cruzada independentista.