"Creo que es un síntoma de salud democrática que los estudiantes tuvieran la suficiente memoria para decir que no es bonito que en un centro universitario intervenga quien saca pecho con el terrorismo de Estado", aseguró Iglesias.
González no llegó a ser acusado formalmente y se desconoce si tuvo implicación directa con los GAL, pero ciertos gestos del expresidente del Gobierno dan pie a que Iglesias se atreva a decir que "saca pecho por el terrorismo de Estado".
En 1998, el ministro de Interior durante el Gobierno de González, José Barrionuevo, fue encarcelado por su relación con los GAL y el expresidente le acompañó hasta la puerta del centro penitenciario como un gesto de apoyo.
También estaba prevista la participación en esa charla de Juan Luís Cebrián, director del grupo PRISA, uno de los conglomerados empresariales más importantes de España en el ámbito de los medios de comunicación, del que forman parte el diario El País o la Cadena SER.
El grupo empresarial culpó a Podemos de ser el autor intelectual del boicot ya que algunos de los estudiantes cantaron consignas que han formado parte del discurso del partido en los últimos años.
En opinión de Iglesias, las críticas de PRISA reflejan "un déficit democrático".
Iglesias concluyó su valoración sobre la polémica en torno a este asunto instando al PSOE y a PRISA a tomarse este tipo de manifestaciones en su contra con deportividad ya que, a su modo de ver, "en democracia no se puede tener la piel tan fina cuando se protesta".
