Concluye la investigación de la catástrofe aérea en la que murió el jefe de Total

Los expertos llegaron a la conclusión de que los tripulantes del Falcon y el jefe del turno del servicio de ingeniería del aeropuerto moscovita de Vnúkovo disponían de la información cuyo uso oportuno habría permitido prevenir la tragedia.

"La simulación mostró que si la tripulación hubiera tomado la decisión de suspender el despegue y usar según normas tecnológicas todos los medios de frenado disponibles, se había podido evitar la catástrofe con mucha probabilidad", dice el informe publicado en la web del IAC.

Entre las causas más verosímiles del siniestro se indicaron la falta del debido control por parte del jefe del turno del servicio de ingeniería del aeródromo, en cuyo organismo se detectó alcohol, y el incumplimiento de la prohibición de salir máquinas a la pista de aterrizaje sin recibir autorización del respectivo controlador.

Además, el jefe del turno no se comunicó con el conductor de la máquina quitanieves al perder el contacto visual con él.

Entre otras causas se señalaron el incumplimiento por el personal médico del aeropuerto del control sobre los conductores de las máquinas especiales, por lo que aumentó el riesgo de que consumaran alcohol en horas de trabajo, así como la imposibilidad de que los conductores escucharan por radio lo que dicen los controladores aéreos.

El presidente del gigante petrolero Total, Christophe de Margerie, de 63 años, murió el 20 de octubre de 2014 cuando el Falcon 50EX de la compañía Unijet en que viajaba chocó con una máquina quitanieves en la pista de despegue del aeropuerto Vnúkovo de Moscú, preparándose a emprender el vuelo rumbo a París.

Junto con De Margerie fallecieron tres tripulantes del avión.