El Comité de Protección Social de la localidad cumplió con las exigencias sobre el pago de pensiones a 501 prostitutas que han alcanzado la edad de jubilación y obligó a los empleadores a hacer contribuciones al fondo de pensiones para otras 1.300 mujeres que ejercen la prostitución.
El Comité de Protección Social encontró que, de esta manera, fueron conculcados los derechos de 1.800 profesionales de la industria e impuso multas a los empleadores.
La prostitución en Turquía es legal. Bajo la ley otomana, una fémina que quiere dedicarse a la prostitución debe registrarse y obtener una tarjeta de identificación con sus datos de salud. Sin embargo, la mayoría de las trabajadoras del sexo en Turquía no está registrada por los obstáculos que les ponen las autoridades locales.