En un telegrama de condolencias enviado al presidente ruso Vladímir Putin, Lukashenko calificó como "un dolor común" la tragedia y afirmó que "no ha dejado indiferente a nadie en Bielorrusia".
"Estamos cerca en este momento difícil y compartimos enteramente esta desgracia horrible", subrayó el líder bielorruso en su mensaje.
En la mañana del 25 de diciembre, un Tu-154 del Ministerio de Defensa ruso que partió de Moscú con destino a Latakia, Siria, cayó en el mar Negro poco después de despegar del aeropuerto de Sochi donde hizo una escala para repostar.
A bordo de la aeronave se encontraban ocho tripulantes y 84 pasajeros, en su mayoría, integrantes del Conjunto de Canto y Danza Alexándrov del Ejército ruso que se dirigían a Siria para dar un concierto ante los militares emplazados en la base de Hmeymim.