"La decisión de la Administración de Obama no es solo un regalo envenenado sino que demuestra la intención de círculos hostiles a Rusia de continuar la Guerra Fría", dijo Pushkov.
Además, Obama reformó una orden ejecutiva de 2015 titulada "Toma de medidas adicionales para hacer frente a la emergencia nacional vinculada a actividades cibernéticas maliciosas significativas" para habilitar la imposición de sanciones a cinco entidades y a seis individuos rusos por supuestos ciberataques para interferir en el curso de las elecciones presidenciales.
El portavoz de Kremlin, Dmitri Peskov, declaró que las nuevas sanciones de Washington tienen un evidente "carácter destructivo" para las relaciones bilaterales, así como señaló que "no tienen fundamento y son ilegales desde el punto de vista del derecho internacional".