"¡Recibe dinero luchando contra Trump!", resume el lema del anuncio de la organización Demand Protest en San Francisco. El mismo eslogan ha sido difundido en muchas otras localidades estadounidenses, como Austin, Colorado Springs, Columbus, Denver, Detroit, El Paso, Fort Worth, Jacksonville, Oakland, Filadelfia, Phoenix, San Diego, Seattle y Washington.
"Da la impresión de que al haberse entrenado en Kiev están listos para organizar un Maidán en Washington para no permitir que Trump asuma el cargo", manifestó el presidente ruso Vladímir Putin días previos a la asunción del nuevo presidente de EEUU.
El columnista de Sputnik y exdirector de la cadena EuroNews Luis Rivas señala que "parece curioso que aquellos que han sido acusados de organizar manifestaciones en el exterior de sus fronteras para defender sus propios intereses, ahora estén organizando en su propio país manifestaciones también para defender sus propios intereses partidistas. Es absolutamente negativa la imagen que están dando de ellos mismos y de su país. La imagen que está llegando al exterior, y que están dando algunos sectores de la sociedad norteamericana, es de alguien que considera a su propio país como una república bananera".
Manifestantes se concentraron frente al Club Nacional de Prensa, donde partidarios de Trump celebraban la fiesta de los "DeploraBal", un juego de palabras que en inglés significa "el baile de los deplorables". "Deplorables" fue el calificativo que Hillary Clinton, utilizó en un evento de su campaña presidencial para definir a "la mitad" de los seguidores de Trump.
A esto, se suma que personajes como Robert De Niro, Cher, Mark Ruffalo, Alec Baldwin y Julianne Moore se unieron al alcalde de Nueva York, Bill de Blasio y al cineasta Michael Moore y para expresar su preocupación sobre el rumbo que tomará el país. "Con un poco de dolor, con un poco de incomodidad, pero con mucho trabajo por nuestra parte vamos a detener a este hombre. No durará los cuatro años", decía Michael More.
Para Luis Rivas, "estas manifestaciones intentan afectar negativamente a la democracia de EEUU. El término 'deplorable' define muy bien lo que ha sido la campaña de las élites contra los votantes de Donald Trump. Ese desprecio de Hillary Clinton contra la mitad de los norteamericanos es el ejemplo de los que pretendían ser los representantes del propio pueblo".
"Es el ejemplo del desprecio a esas personas que no forman parte de esa 'élite intelectualoide' de actores de Hollywood que tan desesperados están con la victoria de Donald Trump, y de esa élite de los principales medios de prensa norteamericanos que han estado jugando desde antes de las campañas presidenciales, alimentando este tipo de manifestaciones en contra de Trump. Los medios están mezclando mucha información sobre este tipo de manifestaciones, especialmente las que están promovidas y protagonizadas por actores de Hollywood, esa élite de EEUU que desde sus mansiones y desde sus altos salarios pueden permitirse el lujo de ser muy progresistas cuando jamás se juntarían a tomar una cerveza con los 'deplorables', concluye Luis Rivas.
