"Vemos a una Rusia más pujante, advertimos un incremento militar significativo, pero no vemos una amenaza directa", afirmó.
Según Stoltenberg, "la OTAN reaccionó, por ello por primera vez emplazamos militares en la región este de la Alianza".
Durante la cumbre de Varsovia que se realizó en julio de 2016, la OTAN decidió desplegar en abril próximo cuatro batallones multinacionales en Polonia, Lituania, Letonia y Estonia.
Los cuatro batallones estarán a cargo de un país líder (Alemania, Canadá, EEUU y Reino Unido) que asumirá el mando y aportará el grueso de los efectivos.
La OTAN explica que el envío de batallones se debe a la "preocupación por las acciones agresivas de Rusia".
Moscú sostiene que la ampliación de estos contingentes en su frontera supone una amenaza a su seguridad, además de ser medidas provocativas que carecen de fundamento real, al no existir ninguna acción agresiva por parte de Rusia.
