"Pedimos a personas que puedan abandonar estas zonas bajas (…) que lo hagan ahora, no queremos ser testigos de la tragedia por esta tormenta (…), no podemos arriesgar vidas de personas", declaró el comisario de la policía del estado, Ian Stewart.
Agregó que la evacuación de esta envergadura se realiza en el estado por primera vez.
El aeropuerto internacional de la ciudad costera de Townsville suspendió su actividad, obligando a una serie de compañías aéreas cancelar los vuelos previstos para lunes y martes.
La Oficina de Meteorología advirtió de que el Debbie podría convertirse en la peor tormenta desde 2011, cuando el país fue golpeado por el ciclón Yasi.
Según las previsiones del ente, el ciclón alcanzará la costa australiana en la mañana del martes y para ese momento aumentará de categoría dos a categoría cuatro.