Los frutos de los esfuerzos financieros y administrativos realizados por las autoridades rusas pueden verse claramente en los resultados de 2016. En ese año, muchos nuevos robots, vehículos aéreos no tripulados, sistemas de lucha radioelectrónica y una amplia gama de avances fueron presentados y ensayados en condiciones de combate en Rusia.
Potencial humano
Anteriormente, el teniente general Ígor Mákushev declaró que las directivas aprobadas por el ministro de Defensa de Rusia, Serguéi Shoigú, implicaban llevar a cabo una serie de "pasos destinados a incrementar el potencial humano de los nuevos Institutos de Ciencia e Investigación y ampliar las posibilidades vinculadas con la investigación de sus empleados".
En 2017, Moscú prevé formar y contratar a 300 académicos y especialistas para elevar el rendimiento de sus centros de investigación. Además, está prevista la rehabilitación de más de 100 instalaciones científicas.
El Ministerio de Defensa de Rusia no se limita a establecer nuevos centros de formación sino que además vuelve a la práctica soviética de crear departamentos militares en las universidades civiles.
En marzo de 2017 también se tomó la decisión de crear un departamento militar en la Universidad Nacional de Investigación Técnica de Irkutsk, en el que se planea formar mecánicos aeronáuticos, técnicos de radiocomunicaciones y electricistas de equipamientos aeronáuticos.
Investigación
No obstante, el modelo soviético de educación no es el único sistema que aplicará el Ministerio de Defensa de Rusia en el futuro para modernizar su complejo militar industrial. El ente también apuesta por la investigación y la experimentación.
La estructura del organismo estará compuesta por varios centros de investigación que se centrarán en estudiar los sistemas de gestión de la infraestructura de la información de las Fuerzas Armadas de Rusia, así como los sistemas de comunicación, entre otros.
En este sentido, los informáticos y los matemáticos seguirán siendo perfiles profesionales demandados por el Ministerio de Defensa de Rusia, en especial aquellos jóvenes que tengan un don para las nuevas tecnologías.
Compañías científicas
Este enfoque ha recibido un empujón en 2016, cuando cuatro compañías de este tipo empezaron a operar en las ciudades rusas de Kostromá, Tambov, Sérguiev Posad y San Petersburgo.