Anteriormente, Selezniov se declaró culpable de robar tarjetas de crédito tanto a empresas como a particulares por un monto aproximado de 170 millones de dólares, de todas formas la Corte del Distrito Oeste de Washington, en EEUU, se negó a tomar en consideración la confesión escrita del ciudadano ruso.
Por otro lado, el abogado defensor, Igor Litvak, alegó antes de la sentencia que una pena de 30 años era "completamente inapropiada".
Por su parte, Seleznev se declaró culpable el pasado 19 de abril.
"Reconozco mi responsabilidad por todo (…) Tomé el camino erróneo y espero que me perdonen", escribió Seleznev en una carta de 11 páginas al juez estadounidense.
Selezniov fue detenido por agentes del servicio secreto de EEUU en 2014 en las islas Maldivas y trasladado primero al atolón de Guam y luego a la ciudad de Seattle (noroeste).
El programador ruso fue sentenciado por fraude informático, robo de información de ordenadores no protegidos, sustracción de información personal y otros cargos.
Según el auto acusatorio, el informático causó daños por 170 millones de dólares y en su ordenador fueron descubiertos 1,7 millones de números robados de tarjetas bancarias.
En agosto de 2016 un jurado declaró a Selezniov culpable de 38 de los 40 cargos que se le imputaban.