Hace cinco años, solo el 36% de los checos calificaban de errónea la división del Estado checoslovaco.
"La mitad de los ciudadanos checos califican de errónea la división de Checoslovaquia en dos países, en los estudios anteriores prevalecían aquellos que la aprobaban", dijo el portavoz de la encuestadora, Martin Buhtik.
La encuesta se llevó a cabo del 25 al 26 de mayo y abarcó a más de 1.000 personas.
Las encuestas de opinión pública realizadas en 1992 en ambas partes del país evidenciaron la falta de deseo de la mayoría de los checos y aún más de los eslovacos hacia la desintegración, sin embargo las élites políticas hicieron realidad el divorcio de los dos pueblos.
Checoslovaquia existió de 1918 a 1992 y a diferencia de Yugoslavia que también desapareció el mismo año se escindió de manera pacífica.