"No es la primera ocasión en que un Gobierno de Estados Unidos se aleja de un importante acuerdo internacional sobre temas ambientales, de hecho, Washington no es parte de la Convención de Naciones Unidas de Diversidad Biológica", explicó el experto en el Palacio de las Convenciones de La Habana al comentar la política ambiental de líder estadounidense, Donald Trump.
Bush entonces justificó su decisión con supuestos problemas que podrían afectar la producción nacional, reducir empleos y dañar la competitividad de la potencia del norte.
Trump, por su parte, declaró la retirada de ese entendimiento catalogado por el director del CIEM "como el más importante instrumento con que se cuenta a escala global en este momento para hacer frente al cambio climático".
"En definitiva, es preciso señalar que si bien era una noticia que se esperaba por el propio accionar de Trump desde su toma de posesión en el sentido de un conjunto de acciones que comenzaron con el nombramiento de Scot Pruitt como director de la Agencia para la Protección Ambiental de Estados Unidos", comentó Pichs en alusión al exfiscal de Oklahoma y escéptico del cambio climático.
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— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 2 de junio de 2017
Otras señales posteriores fueron decisiones como la reducción de los presupuestos científicos, la aprobación del desarrollo de infraestructuras petroleras, oleoductos y facilitación de perforaciones en determinadas zonas como el Ártico, el Atlántico y el Pacífico.
"O sea, se venían generando un conjunto de acciones y se esperaba esta noticia, pero fue muy impactante porque estamos hablando del segundo emisor mundial después de China de gases de efecto invernadero, y el principal emisor desde el punto de vista histórico si se toman las secuencias desde el año 1850".
En adición, según el experto, EEUU es uno de los mayores emisores per capita de gases de efecto invernadero, en particular de dióxido de carbono.
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En cuanto al daño causado por la decisión de Trump, Pichs sostiene que ya se hace visible en materia de financiamiento de la ciencia y en aporte para la transferencia de tecnología hacia los países en desarrollo.
Ejemplificó con el caso de China, erigida en la principal inversionista en fuentes renovables, con desembolsos anuales que superan los 100 000 millones de dólares, además de continuar comprometida con los esfuerzos del Acuerdo de París.
Subrayó que de igual forma los países europeos también han mostrado su apego al compromiso de París, y dentro de los propios Estados Unidos importantes estados y segmentos de la comunidad de negocios se han pronunciado por seguir la línea de lo planteado en el acuerdo.
"Por ello pienso que esta maquinaria multilateral podría mantenerse a pesar de la situación originada por la decisión de Trump", concluyó el director del CIEM.
Considerado uno de los más eminentes expertos cubanos en temas de energía y medio ambiente, Pichs es miembro del Comité Científico Asesor del Instituto Interamericano para la investigación sobre los cambios globales (IAI, por sus siglas en inglés).
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Igualmente, fue Coordinador del Capítulo de escenarios socioeconómicos y ambientales para América Latina y el Caribe, en el proyecto GEO-4 del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente.
