El 18 de julio, el jefe de la República Popular de Donetsk, Alexandr Zajárchenko, propuso crear el Estado de Malorrusia, heredero legal de Ucrania, en un periodo de transición de tres años, en cuya Constitución se fijaría su estatus de país no alineado, la intención de restablecer las relaciones con Moscú y de adherirse al Estado de la Unión de Rusia y Bielorrusia.
"Estos planes inapropiados y provocativos son un argumento más a favor de la aprobación de la ley (…) sobre la restauración de la soberanía estatal de Ucrania en el territorio temporalmente ocupado de las regiones de Donetsk y Lugansk y la aceleración de la liberación del este del país", escribió Turchínov en Facebook.
El mandatario ucraniano, Petró Poroshenko, ordenó celebrar consultas con los países del cuarteto de Normandía (Alemania, Francia, Rusia y Ucrania) sobre la ley de reintegración de Donbás.
El documento, que en septiembre se prevé someter a debate en la Rada, estipula declarar las autoproclamadas Repúblicas de Donetsk y Lugansk como territorios ocupados para que el Ejército opere allí.
Donetsk y Lugansk insisten en que la solución del conflicto tiene que ajustarse a los acuerdos de Minsk y que otras variantes son inadmisibles.
En abril de 2014 Ucrania inició una operación militar en Donbás, donde se proclamaron repúblicas independientes tras el cambio violento de Gobierno ocurrido en Kiev en febrero del mismo año.
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Los acuerdos de Minsk, suscritos en septiembre de 2014 y en febrero de 2015, sentaron las bases para una solución política del conflicto, aunque hasta ahora no consiguieron el cese de la violencia.