"Consideramos la creación en Rusia de nuevos misiles con un alcance superior a los 500 kilómetros como una seria violación del Tratado INF, es una amenaza para nosotros y para nuestros aliados", dijo el diplomático estadounidense.
El embajador subrayó que su país considera importante el Tratado INF y "lo sigue al pie de la letra".
Moscú ha reafirmado en múltiples ocasiones su compromiso con dicho Tratado, rechazando las acusaciones de EEUU.
A finales de marzo, el canciller ruso, Serguéi Lavrov, declaró que Rusia también tiene "serias dudas" sobre el cumplimiento del Tratado por parte de Washington.
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El documento fue firmado por los entonces presidentes de EEUU, Ronald Reagan, y de la Unión Soviética, Mijaíl Gorbachov, en 1987 y entró en vigor en 1988.
