"El proceso de reestructuración de la deuda que planifica la compañía, probablemente, se prolongue debido a las limitaciones que impuso el Gobierno estadounidense", explica la calificadora.
Los analistas de Fitch consideran que las sanciones de Washington obstaculizan la reestructuración de la deuda ya que prohíben a las compañías estadounidenses adquirir nuevos bonos de la petrolera PDVSA.
EEUU extendió la semana pasada sus sanciones unilaterales contra Venezuela al incluir en su lista negra a tres ministros del Gobierno venezolano, al embajador del país sudamericano en Italia y otros altos funcionarios.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, denunció que Washington con sus restricciones al uso del sistema internacional de pagos dificulta que el país cumpla con sus compromisos.
PDVSA pagó el 2 de noviembre 1.121 millones de dólares por el capital de un bono y el 27 de octubre desembolsó otros 842 millones.
Fitch asegura que elevará la nota crediticia si la petrolera sigue honrando sus deudas.
El Gobierno venezolano inició las conversaciones con los acreedores internacionales para reestructurar la deuda del país.