WSJ llama a EEUU a prepararse para una "guerra fría" en el círculo Ártico con Rusia

Dobriansky destacó que "el Ártico es una región de tremenda importancia estratégica para el comercio mundial y la seguridad nacional" de EEUU. La autora del texto recordó que Rusia utiliza las aguas del Océano Ártico para basar sus submarinos de misiles balísticos, los cuales son un componente clave de las fuerzas nucleares estratégicas del país. Además, el país planea ampliar la infraestructura militar regional para protegerlos.

Para este propósito, se estableció el Comando Estratégico en el Ártico y se iniciaron costosos proyectos militares de construcción de nuevos aeropuertos, puertos e instalaciones de defensa aérea.

El Ártico es también una fuente de recursos naturales para Rusia. De acuerdo con datos del año 2017, la producción del Ártico representó el 20% del producto interno bruto del país y el 22% de sus exportaciones. La mayoría de los recursos energéticos de Rusia se extraen en esta región: el 95% del gas natural y el 75% del petróleo.

El derretimiento del hielo ártico aumenta la importancia de esta región. Si la tendencia continúa, será posible navegar por la Ruta Marítima del Norte durante todo el año, lo que podría cambiar significativamente el mapa de las rutas de transporte marítimo mundial y darle a Moscú una gran ventaja económica.

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"No hay una única instalación militar occidental en el Ártico y solo unos pocos activos de la Guardia Costera de EEUU operan allí. Una nueva y robusta respuesta occidental a la acumulación militar rusa en el Ártico se hace necesaria", destacó Dobriansky.

Por lo tanto, concluye la autora del artículo, es necesario elaborar una nueva respuesta firme de Occidente para fortalecer el poder militar de Rusia en el Ártico. El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, por ejemplo, sugirió la creación de un Comando Atlántico en el Ártico.

Dobriansky consideró que pese al apoyo de la administración Trump a la idea de un nuevo comando de la OTAN, el país norteamericano "puede hacer más".

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"EEUU debe garantizar que el nuevo comando tenga una misión clara que aborde los intereses de la Alianza en el Ártico (…) La misión debe estar respaldada por los recursos apropiados (…) proporcionados por los aliados de la OTAN, en particular los que tienen intereses en el Ártico", escribió Dobriansky.

La autora del texto instó a EEUU a comenzar a construir rompehielos avanzados y realizar más ejercicios, patrullas y misiones de entrenamiento en el Ártico. Además, recomendó que la sede del posible nuevo comando de la OTAN sea ubicado en territorio estadounidense.

Anteriormente el presidente ruso, Vladímir Putin, otorgó a los navíos rusos el derecho exclusivo de transportar petróleo y gas a lo largo de la Ruta Marítima del Norte, la ruta más corta entre Europa y Asia.

Parece que los éxitos de Rusia no dan la tregua a EEUU, afirman los expertos, ya que el país le gana el pulso a las sanciones con sus megaproyectos en el Ártico.

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