"La situación es bastante difícil, entre la mañana de ayer (sábado) y las 21.00 (hora local del domingo, 18.00 GMT) cayeron 38 centímetros de nieve, lo que supera la norma mensual de febrero", dijo a la prensa.
El funcionario advirtió de que la cantidad de nieve seguirá aumentando.
Por su parte, el Ministerio de Emergencias emitió una alerta horas debido al empeoramiento de las condiciones meteorológicas, con rachas de viento hasta unos 60 kilómetros por hora en las próximas horas.
El ente recomienda a los moscovitas no salir a la calle ni coger el coche si no es necesario, así como evitar pasar cerca de árboles, líneas de electricidad o vallas publicitarias.
Una fuerte nevada y una lluvia helada azotan a la capital rusa y sus alrededores desde el 3 de febrero.
Según datos de los meteorólogos, se trata de una nevada que ocurre una vez cada 100 años.
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Las autoridades moscovitas informaron de un muerto y varios heridos.
La tormenta también dejó unos 1.600 árboles caídos.