El yacimiento de gas de Odesa proporciona a Crimea casi la mitad de su propia producción de gas, recoge RBC las declaraciones de las autoridades federales rusas y las del Gobierno local de Crimea.
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Una fuente de RBC afirmó que Rusia va a suspender la producción en el yacimiento como "un movimiento táctico". No se trata del retorno del control sobre el campo a Ucrania, sino de eliminar formalmente el objetivo de la disputa.
Rusia consintió en participar en la disputa marítima con Ucrania porque "es muy sensible a las cuestiones del derecho internacional", señaló Iván Timoféev, director del Consejo Ruso para Asuntos Internacionales, citado por el medio. Según Timoféev, Rusia observó todas las normas del derecho internacional en lo relacionado con la reunificación con Crimea, pero su interpretación no coincidió con la visión de la mayoría de los países.
"Creo que todavía no les puedo responder a la pregunta de si se ha tomado una decisión final al respecto, todo dependerá de las bases egales", declaró el ministro ruso de Energía, Alexandr Nóvak, en el marco del Foro Ruso de Inversión, realizado en Sochi.
Según la fuente del diario, el tema primordial del litigio no es el depósito de Odesa, sino el puente de Crimea. Las autoridades ucranianas denunciaron la restricción de la navegación a través del estrecho de Kerch debido a la construcción del puente.
El campo de gas de Odesa se encuentra en la plataforma del mar Negro, a 130 km de Odesa y a 155 km de la costa de Crimea. Sus reservas comprobadas ascienden a los 21.000 millones de metros cúbicos de gas.
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El depósito se descubrió a finales de la década de los 1980, pero solo en 2012 Ucrania comenzó la producción en masa en la zona. En marzo de 2014, tras la reunificación con Crimea, el campo quedó bajo el control de Chernomorneftegaz y, al menos hasta el 2016, era la principal fuente de gas para Crimea.
En 2017, Crimea comenzó a utilizar el gas suministrado desde la parte continental de Rusia a lo largo del gasoducto Kubán-Crimea.
