"El mundo se enfrenta hoy a amenazas sin precedentes y si le añadimos la confrontación entre países o grupos de países esto no beneficiará a nadie… Estamos obligados a aunar los esfuerzos en la lucha contra un mal como el terrorismo que reta a la civilización", dijo el embajador.
"La capacidad de combate de las Fuerzas Armadas rusas es la garantía de la seguridad nacional y también un importante factor de la estabilidad global como lo había señalado el presidente Vladímir Putin", subrayó Antónov.
En su opinión, hoy se necesita más que nunca desarrollar la cooperación internacional en el ámbito militar y diseñar un sistema de seguridad indivisible e igual para todos.
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"Es decir, un sistema sin bloques porque solo así podremos garantizar la paz y la tranquilidad de nuestros ciudadanos", enfatizó el embajador ruso en EEUU.
