La medida busca poner fin a las protestas provocadas por las reformas en todo el país que dejaron, según contabilizó la vicepresidenta nicaragüense, Rosario Murillo, "casi 10 muertos", escribe el diario.
"Al escuchar el llamado del Cosep (Consejo Superior de la Empresa Privada) estamos confirmando nuestra disposición de retomar ese diálogo abierto y franco que nos ha caracterizado y que ha dado tantos buenos resultados", declaró Murillo citada por el medio.
Las protestas, en las que ha habido enfrentamientos entre manifestantes y policías, comenzaron el miércoles a raíz de los cambios en el INSS, que incluyen un aumento en las cotizaciones y una deducción del cinco por ciento a las pensiones.
Las manifestaciones se han producido en al menos ocho departamentos del país.
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