Rudskói señaló que "el Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Rusia llevó a cabo una investigación detallada de los resultados de los ataques".
"Los fragmentos de misiles recolectados, el análisis de los embudos de proyectiles y explosiones, el carácter de las destrucciones permiten concluir que de los 105 impactos anunciados en la zona de los objetivos se detectaron como mucho 22", dijo.
Asimismo, indicó que contra la instalación de Him Shinshar, en las inmediaciones de Homs, impactaron solo 7 misiles occidentales y no 29 como dice la coalición.
"En la zona donde se encuentra el centro de investigaciones Barza solo se detectaron trece impactos de los setenta y seis declarados", señaló.
Un total de 46 misiles de EEUU y sus aliados fueron derribados al este y oeste de Damasco.
"Según datos de inteligencia, datos de control objetivo, el trabajo sobre el terreno y las declaraciones de los testigos, los sistemas de misiles antiaéreos Pántsir, Osá, Strelá-10, Buk, Kvadrat y S-125 derribaron 46 misiles de crucero durante el ataque", reveló.
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Rudskói comentó que todo ese armamento antiaéreo es utilizado para proteger Damasco y los aeródromos de Duvali, Dumeir, Blei y Mezze de la Fuerza Aérea siria.
El jefe de la Dirección de Operaciones del Estado Mayor General ruso subrayó que la mayor parte de los misiles de crucero lanzados contra Siria fue interceptada con sistemas antiaéreos de fabricación soviética.
"Quisiera destacar que la mayor parte de ese armamento de alta precisión fue derribada con sistemas soviéticos desarrollados hace 40 años —entre ellos S-125, Osá y Kvadrat— y posteriormente modernizados con la ayuda de especialistas rusos", indicó.
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Asimismo, comunicó que los misiles de crucero lanzados por la coalición no habían entrado en la zona de responsabilidad de la defensa antiaérea rusa en Siria.
"Ninguno de los misiles entró en la zona de responsabilidad rusa en Siria", aseguró Rudskói al agregar que la "agrupación de defensa antiaérea rusa está dispuesta a repeler cualquier ataque aéreo".
"Una parte de los misiles no alcanzó sus objetivos al parecer por errores tecnológicos", dijo Serguéi Rudskói, jefe de Operaciones del Estado Mayor General ruso.
Esos proyectiles defectuosos, indicó, pudieron provocar la muerte de civiles.
Precisó que algunos de eso misiles "inteligentes" impactaron en recintos que no pertenecían al Ejército sirio.
"Los costosos misiles 'inteligentes' causaron daños leves a algunas edificaciones no vinculadas a la actividad militar", puntualizó.
"Ahora son investigados por nuestros especialistas, los resultados de este trabajo serán utilizados para perfeccionar los modelos de armas rusos", indicó.
Según el alto militar, "dos de ellos, incluyendo un misil de crucero Tomahawk y un misil aéreo de alta precisión, fueron trasladados a Moscú".
Sin embargo, Rudskói declaró que los ataques de la coalición occidental no pudieron detener el proceso pacífico en Siria.
"Los ataques de la coalición occidental no pudieron impedir el proceso pacífico actual en la República Árabe de Siria, el territorio de Guta Oriental, hace poco liberado de los radicales, regresa a la vida pacífica", dijo.
Añadió que en los suburbios de Damasco se han restaurado los organismos gubernamentales y se están realizando obras de reconstrucción en el ámbito residencial.
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Según Rudskói, en muchos pueblos se ha reiniciado el suministro de agua y electricidad, las tiendas funcionan y los precios de los productos han bajado.
EEUU, el Reino Unido y Francia atacaron en la madrugada del 14 de abril las instalaciones sirias donde supuestamente se fabricaban armas químicas.
En una hora y media, las tres potencias dispararon más de 100 misiles, la mayor parte fueron derribados por la defensa antiaérea siria, según informaron los militares rusos que siguieron de cerca todos los lanzamientos.
El presidente ruso, Vladímir Putin, calificó el ataque del eje occidental como un acto de agresión contra un Estado soberano, señalando que el presunto uso de armas químicas que sirvió de pretexto para lanzar ese ataque no fue confirmado ni por los expertos rusos ni por la población local.
