El texto señala que Madrid y Atenas "están dispuestos a recibir de vuelta a los demandantes de estatus de refugiado que en el futuro sean interceptados por las autoridades alemanas en la frontera entre Austria y Alemania, y cuyos datos se encuentren en la base de huellas digitales EURODAC por haber sido introducidos allí por dichos países [España y Grecia]".
"Alemania, España y Grecia confirmaron su apoyo al acuerdo sobre una reforma del sistema europeo de migración en 2018, gracias a la cual el principio de repartición justa de la responsabilidad será equilibrado con el principio de la solidaridad", indica el documento.
Por su parte, Berlín promete que hará todo lo que esté a su alcance para lograr la reunificación de las familias que se encuentran en Grecia y España.
Según el comunicado, antes de que entre en vigor el nuevo sistema de migración de la UE, las decisiones temporales de los países miembros que están dispuestos a nivel europeo a presentar una iniciativa son el mejor comienzo de ese trabajo.
Más sobre el asunto: Europa naufraga en su política de inmigración
El documento subraya la necesidad de un apoyo financiero de los países que integran la UE en sus fronteras actuales, incluida una ayuda a la policía y a los expertos en problemas migratorios.
Desde la víspera, en Bruselas se celebra una cumbre de la Unión Europea dedicada, entre otras cuestiones, al problema migratorio.
Los líderes de la UE consiguieron un acuerdo sobre la inmigración ilegal que prevé reforzar las medidas para limitar la entrada en el territorio europeo de migrantes clandestinos, así como luchar contra los organizadores del tráfico de personas y crear centros de control de migrantes en Europa.