"Varios miles de personas aceptaron abandonar las localidades en la provincia de Al Quneitra, los rebeldes que rechazan la reconciliación salen junto con sus familias", dijo un portavoz del ente.
A los rebeldes que decidieron abandonar voluntariamente los territorios controlados por las tropas gubernamentales se le permite llevarse un máximo de un fusil de asalto y tres cargadores llenos cada uno, mientras que los jefes de grupos armados pueden portar una pistola y deben entregar el resto de las armas.
Por su parte, el representante del centro, Vladímir Zalozni, comentó que a los rebeldes se les incautan distintos tipos de armas, como artefactos y cinturones explosivos, granadas, rifles de francotirador o lanzagranadas.
Previamente, el Ejército sirio y los grupos armados pactaron una tregua local en la provincia de Al Quneitra, en el suroeste de Siria, según la cual una parte de los rebeldes se entregó a las autoridades para aprovechar la oportunidad de reintegrarse a la sociedad, mientras que la otra, que se negó a deponer las armas, puede salir en autobuses con sus familiares hacia Idlib.
Tema relacionado: Rebeldes sirios entregan 26 tanques y cientos de armas ligeras en Deraa
La salida de los rebeldes empezó el 20 de julio.