El detenido es un ciudadano senegalés de 32 años que fue identificado a partir de las imágenes grabadas por testigos con sus celulares el día de los hechos.
Los hechos ocurrieron en la noche del miércoles 1 de agosto en la céntrica plaza Catalunya cuando el turista, José Bravo, intentó defender a una mujer que estaba siendo increpada por un grupo de manteros (vendedores ambulantes) cuando ésta les recriminó que no podía pasar con su carrito para bebés por la zona que ocupaban.
El turista intercedió a favor de la mujer, que estaba siendo insultada, cuando los vendedores lo golpearon con un cinturón, causándole con uno de los golpes una herida profunda y sangrante; la víctima de la agresión fue trasladada de inmediato al Hospital Clínic, donde se le trataron las heridas y fue dada de alta la misma noche.
"Este país se está convirtiendo en el tercer mundo, eso es culpa de los políticos", lamentó Bravo al agregar que "está muy peligrosa la vida en esta ciudad".
El suceso, y la difusión de las imágenes de la acera ensangrentada, reabrieron el debate sobre la venta ambulante en Barcelona, que la oposición considera que degrada la imagen de la ciudad; el Ayuntamiento sostiene que los partidos de la oposición buscan alimentar la alarma social con fines partidistas.
Tema relacionado: 'Top Manta': la marca que causa sensación en toda España
Los manteros niegan la versión oficial y aseguran que la pelea la iniciaron dos hombres bebidos que agredieron a uno de los vendedores con una motivación de tipo racista.