Murajovski recordó que 2010 Siria y Rusia acordaron la entrega de sistemas S-300 a Damasco, sin embargo, Israel expresó su preocupación y pidió a Moscú cancelar el contrato.
"Israel analizó qué pasaría si en vez de los S-200 Siria tuviera los S-300, pues entonces sería capaz de alcanzar casi todo el espacio aéreo de Israel y derribar sus aviones casi al despegar, por tanto pidieron a la estimada Federación Rusa que no cumpla el contrato", dijo el experto a periodistas.
"Les hicimos caso, renunciamos a nuestras obligaciones, devolvimos a Siria 400 millones de dólares que ya nos habían transferido, sufrimos daños reputacionales" a ojos de otros compradores potenciales, resumió Murajovski.
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Esa situación debe cambiar, en opinión del experto, teniendo en cuenta las últimas provocaciones de Israel.
"El Ejército ruso recibe en los últimos años los sistemas antiaéreos S-400, y los S-300 se retiran a la reserva, es decir, si se reanuda el contrato con los sirios, podremos suministrar los S-300 en el transcurso de dos o tres meses", aseguró.
Por tanto, "es necesario renovar el sistema de defensa antiaérea de Siria en su totalidad, suministrarle los sistemas Tor-M2 para poder proteger los S-300 de un bombardeo" o "los sistemas Buk, que tienen características excepcionales", y paralelamente capacitar al personal.
Murajovski mencionó que un sistema Tor-M2 fue desplegado en la base rusa Hmeymim en Siria en febrero y desde entonces "funciona perfectamente".
En la actualidad, recordó, las fuerzas antiaéreas de Siria cuentan con sistemas S-200, pero los S-300 pertenecen a una generación totalmente distinta.
Aparte de ser móviles —y por tanto menos detectables, a diferencia de los S-200 estacionarios— tienen radares avanzados y el nuevo misil tipo 48N6Е de combustible sólido con alcance de unos 200 kilómetros, que ofrece ventajas en cuanto al mantenimiento frente a los proyectiles con los que cuentan los S-200.
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Según el departamento castrense, en esos momentos cuatro cazas israelíes F-16 estaban atacando instalaciones en Latakia y usaron al Il-20 como escudo, exponiéndolo al fuego del sistema sirio de defensa antiaérea.
Israel avisó a Rusia del ataque con apenas un minuto de antelación, en violación de los acuerdos para prevenir los incidentes peligrosos, denunció el ente militar ruso.
El Il-20 fue derribado por un misil del sistema S-200, lo que provocó la muerte de 15 efectivos rusos.
