Previamente el jefe de las Tropas de Protección Radiológica, Química y Biológica de las Fuerzas Armadas rusas, Ígor Kirílov, declaró que los científicos estadounidenses que trabajan en el Centro Richard Lugar en Georgia administraron a los civiles sustancias tóxicas con pretexto de tratamientos.
"Constatamos varias veces que no es un laboratorio estadounidense, está controlado y financiado plenamente por el Gobierno georgiano", destacó Abashidze.
Agregó que en el centro trabajan los científicos de Georgia, además, los especialistas y periodistas de todo el mundo visitan el laboratorio.
En este contexto, Abashidze comunicó que recordó en una reunión al viceministro ruso de Exteriores, Grigori Karasin que Georgia invita a la delegación rusa a un seminario internacional que se celebrará los días 14 y 15 de noviembre en Tiflis donde todos los participantes podrán visitar el centro Lugar y evaluar su trabajo.
"Si Rusia realmente tiene interés y preguntas sobre las actividades del centro, podrán venir y estudiar todo en el lugar, hacer preguntas, conocer junto con otros países las informaciones necesarias, así que muchas cosas se podrán aclarar", dijo el representante especial del primer ministro georgiano.
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Añadió que unos 20 países ya expresaron su deseo de participar en el evento organizado por Georgia y Alemania.
Guiorgadze afirmó que ese laboratorio podría estar realizando experimentos con seres humanos, incluyendo unas pruebas que posiblemente resultaron letales.
Moscú considera que EEUU y Georgia intentan ocultar el carácter real de la labor del Centro de Investigaciones Richard Lugar, donde opera una unidad del Ejército estadounidense encargada de investigar infecciones altamente peligrosas.
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WRAIR está operando en el centro a través de la Unidad de Investigación Médica del Ejército de EEUU en Georgia (USAMRU-G).
Rusia ya había expresado su preocupación por las intenciones del Departamento de Defensa estadounidense de instalar sus laboratorios médico-biológicos cerca de las fronteras rusas.
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Este 4 de octubre Kirílov denunció que el Pentágono, en el marco del programa biológico militar de EEUU, continúa también la reconstrucción de sus laboratorios en Ucrania, Azerbaiyán y Uzbekistán.
Según Kirílov, la prioridad de estos laboratorios consiste en recopilar información sobre la incidencia de enfermedades infecciosas y extraer colecciones nacionales de cepas de microorganismos patógenos, incluyendo los resistentes a las vacunas y/o los antibióticos.
Los Ministerios de Defensa de Azerbaiyán y Uzbekistán desmintieron la presencia de laboratorios controlados por el Pentágono en su territorio.
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