Según ella, como resultado de los conflictos en Afganistán, Irak, Siria y otros países, diez millones de personas se convirtieron en refugiados.
Las guerras y la acción militar en estos países de Oriente Medio han costado a los contribuyentes estadounidenses 5,9 billones de dólares. Casi 2 billones de dólares más que todo el gasto del Gobierno federal durante el año fiscal 2017-18 que finalizó recientemente.
El Gobierno de Estados Unidos gastó 4,1 billones de dólares durante el año fiscal 2018, que terminó el 30 de septiembre, según el Departamento del Tesoro.
Además del dinero gastado por el Pentágono, el informe incluye los "gastos relacionados con la guerra del Departamento de Estado, los gastos pasados y futuros para el cuidado de los veteranos de guerra, el interés de la deuda que el Gobierno tomó para pagar las guerras y la prevención y respuesta al terrorismo por parte del Departamento de Seguridad Nacional".
Si Estados Unidos continúa gastando a tal escala, incluso si todas las guerras se completan para el 2023, los gastos totales ascenderán a 6,7 billones de dólares, sin incluir los intereses de la deuda, concluyó Crawford.