"Ha llegado más de lo que pensábamos", dijo Bengt Gronlund, responsable de la iniciativa que durará hasta el 11 de enero.
Con esta medida las autoridades buscan que las bandas criminales tengan menos acceso a artefactos explosivos como las granadas de mano.
Según la agencia, muchas de las granadas proceden de las regiones de la antigua Yugoslavia.
Varios expertos alertaron que el problema ha ido en aumento.
Si en 2014 se abrieron ocho expedientes relacionados con las granadas, en 2015 se incoaron 45, y en 2016 la cifra llegó a 52.
Te puede interesar: Colocan una bomba al frente de la casa del fiscal adjunto de Atenas
Conforme a los resultados preliminares de la amnistía, se entregaron también a la Policía 354 kilogramos de pólvora.
La mayoría de los casos se registraron en el sur y en el norte del país.