No hay un duelo en Sudamérica que mueva tanto público como un choque entre River Plate y Boca Juniors. Pero el gran superclásico argentino nunca se había disputado en la final del escenario más importante del fútbol de clubes en la región, la Copa Libertadores de América. Hasta ahora.
El próximo 24 de noviembre, 'la banda' recibirá en casa a los 'xeneize' en un histórico partido que definirá al campeón absoluto de todo el hemisferio sudamericano. Este encuentro promete hacer historia, al ser el primero de ese nivel que se juega a nivel internacional, considera Alexandr Shmurnov, experto en fútbol latinoamericano que sigue todos los campeonatos nacionales del continente.
"Estos dos equipos, al igual que el Real Madrid y el Barcelona, aún no se habían enfrentado en una final internacional. La reputación de este encuentro es muy alta. Una cosa es cuando el superclásico se juega dentro del campeonato argentino, y otra cuando se enfrentan en un torneo internacional, sobre todo en la final. Creo que si el Real Madrid y el Barcelona se enfrentaran en la final de la Liga de Campeones, sería igual de interesante para todos".
En lo que sí el balompié suramericano sobresale ante el europeo, es en la pasión de los hinchas. En palabras de Shmurnov, el público es un elemento de mayor importancia para el fútbol latinoamericano que el europeo. Las emociones, el estado de ánimo, la historia de confrontación, las relaciones entre los jugadores y clubes son factores más relevantes que en Europa.
Boca vs. River: "Nada iguala lo que pasa en el fútbol argentino"
No obstante, Alexandr Shmurnov apunta que el fútbol latinoamericano tiene aún mucho que aprender del europeo en cuanto a difusión en el mundo.
"El marketing aún no es muy fuerte en América del Sur para que los partidos de final acaparen tanta atención en un terreno neutral. Si en Europa es posible llenar el estadio de, a modo de ejemplo, Manchester en un encuentro entre Barcelona y el Bayern, no estoy muy seguro de que en Brasil llegue mucha gente al encuentro entre el Boca y el River", lamentó.
En cuanto al favorito del desenlace, Shmurnov apunta que ambos equipos han mostrado estar igualmente preparados. El propio resultado del primer partido es una clara evidencia: no solo culminó con un empate 2:2, sino que el Boca al jugar en casa siempre llevó la delantera, mientras que el River logró no quedarse atrás estando de visitas, resaltó.
Además, en la Copa Libertadores los goles fuera de casa no tienen un valor doble, algo que le da al próximo partido mayor tensión.